.
nos amamos ... aún y a pesar
.................................... hondos
los zarpazos ... secretos ... fulminantes
como estas manos peces que aletean
por su pan miserable en el estanque
mínimo
......... si olvidamos ..... no habrá cauce
........ que pueda contenernos
.............................. ni habrá escombro
........ capaz de mutilarnos
.
Amigo Julio:
ResponderEliminarSi la musa del Retiro (en el Retiro hay una musa, que lo sepas) te ha llegado de esta manera, trasladándose a la Casa de CAmpo, no ha llegado muy cansada del viaje. Madre mía, pedazos de versos estos de "si olvidamos no habrá cauce // que pueda contenernos // ni habrá escombro // capaz de mtilarnos"
¿¿¿Y si me la mandas, de nuevo, al Retiro???
Abrazos.
Dicen que los peces tienen poca memoria... dicen.
ResponderEliminarDe vez en cuando no viene mal un poco de olvido.
Saludos
Indispensable olvidar cuando aún así se ama, no hay otra manera..
ResponderEliminarEstupenda foto
pues la realidad es esa, me temo, olvidarlo todo
ResponderEliminarpor mucho que tu poema intente agarrarse
a cualquier
clavo
Fogonazos de azul sobre fondo verde. Matisse en la casa de campo.
ResponderEliminarTambién podría ser Kandinsky.
ResponderEliminarManos peces que aletean hacia la superficie. ¿Saben que junto a la luz ansiada está el aire prohibido?
ResponderEliminarEh, unos cuantos días sin pasar por aquí y me encuentro un poema de amor o desamor, quién sabe qué es qué (...hondos/ los zarpazos secretos fulminantes) y mis Caricias colgadas en tu tablón de anuncios. Qué honor estar aquí. Mil gracias, Julio.
ResponderEliminarTe envío el libro enseguida, que quiero que lo leas entero...
Un beso.
Palabras sutiles... como zarpazos de oxígeno.
ResponderEliminarMediocre.
ResponderEliminarCorto.
ResponderEliminar